En la última etapa de crecimiento económico, la bajada de tipos de interés ha formado una oleada alcista en los precios inmobiliarios que, si no es una burbuja en toda regla, se parece bastante. Con un doble efecto. Por un lado ha secado la capacidad de ahorro de las familias por la carga financiera que suponen unas hipotecas estratosféricas. Un efecto que se ha agudizado por la percepción de una mayor riqueza, que ha elevado el consumo.
Así, el ladrillo ha alejado a las familias de la Bolsa. Y no sólo porque ha sido una inversión más interesante, sino porque es una inversión obligada dado el estrecho mercado del alquiler. Por esta vía, la capacidad de inversión de los particulares en la Bolsa o en los nuevos productos financieros se ha reducido.
Article publicat a “CINCO DÍAS” el 12 d´Abril del 2007.
Joan Ollé Bertrán
Presidente del Coapi de Barcelona
http://www.cincodias.com/articulo/mercados/ladrillos/hedge/funds/cdscdi/20070412cdscdimer_3/Tes/